Las competencias sociales y cívicas son aquellas que propician la adquisición de habilidades para vivir en sociedad y ejercer nuestros derechos unido al respeto de los demás miembros de nuestra sociedad. En el ámbito personal, refuerza nuestra autonomía, autoestima e identidad personal y en lo social nos lleva a mejorar nuestras relaciones a la hora de participar, tomar decisiones, adoptar actitudes de respeto que nos lleven a reconocer los valores humanos y evitar los conflictos.